Metodología para la creación de nueva oferta educativa de Grado, Máster y Doctorado (GMD), basada en la metodología de elaboración de la oferta educativa del proyecto « PAPS-ESRS ».

Responsable del Estado miembro: Bartolomé RUBIA AVI / Responsable del Estado beneficiario: Zoubir GACI

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PLANIFICACIÓN DEL DESARROLLO DE METODOLOGÍAS DIDÁCTICAS

La concepción de la enseñanza universitaria, tal y como se desarrolló a lo largo del siglo XX, tomó como referencia los modelos cognitivos de autores como Vygotsky, Brunner y, más recientemente, Gardner. Estos últimos han permitido sobre todo construir una concepción en una perspectiva científica constructiva en la que el aprendizaje no se entiende como un proceso de memorización, sino como una dinámica de construcción/reconstrucción del conocimiento sobre el alumno y para el alumno. Es fundamentalmente una construcción social, porque todo lo que aprendemos lo hacemos porque lo compartimos en una dinámica convencional social y lingüística. También es colaborativa, porque lo que aprendemos lo construimos con las aportaciones de los demás, lo que también nos ayuda a desarrollar la capacidad de trabajo en equipo. Y eso hace que nuestro aprendizaje sea realmente útil y sostenible.

Si nos atenemos a las diferentes competencias representadas por las « inteligencias » de Gardner, debemos entender el proceso de aprendizaje como algo que tiene en cuenta las diferentes formas de acceder al conocimiento y la forma en que se manifiesta la inteligencia en cada uno de nosotros (inteligencia lingüística, lógico-matemática, espacial, musical, corporal/kinestésica, intrapersonal, interpersonal, etc.). Finalmente somos seres sociales, aprendemos juntos, vivimos juntos y así co-realizamos todas nuestras existencias. Por ello, la Universidad, como institución responsable de la formación de la sociedad en sus más altos niveles, debe tener presente cómo aprendemos para encauzar los procesos de enseñanza y aprendizaje que organiza.

Por tanto, la dinámica de la enseñanza universitaria debe basarse en nuevas formas metodológicas/didácticas, que partan de esta misma perspectiva de aprendizaje. La necesaria implementación de actividades educativas en todos los niveles de estudio o cursos universitarios en los que se conduzca a los estudiantes a desarrollar la competencia que mejor caracteriza su inteligencia, así como sus habilidades sociales, de comunicación y de colaboración, les permitirá no sólo dominar perfectamente los contenidos conceptuales del campo para el que se están formando, sino también desarrollar como individuos la competencia para aprender de forma significativa dichos contenidos. La universidad debe contribuir a través de sus experiencias formativas al desarrollo integral de sus estudiantes como profesionales y como personas.

Para lograrlo, el modelo pedagógico debe cambiar. En primer lugar, debe actualizarse para que los alumnos puedan desarrollar su capacidad de trabajo en equipo realizando tareas en grupo. En segundo lugar, también debe implementar nuevos recursos didácticos que vayan más allá de los textos clásicos de los libros de texto, porque no todos aprenden de la misma manera. Por ejemplo, una persona que, para alcanzar mejor sus competencias personales, necesita visualizar gráficamente los contenidos que está aprendiendo en forma narrativa (vídeo), en forma gráfica (esquema), en forma social (compartiendo en un entorno con su grupo de referencia o a través de una red social), etc., debe tener la posibilidad de acceder al material correspondiente, además de poder compartir espacios en los que la tecnología se convierte en uno de los principales elementos de desarrollo. Debería ser posible especificar la naturaleza de dicho aprendizaje no sólo a través de un examen clásico, sino también mediante presentaciones que sustituyan el concepto del libro. Incluso puede ser necesario utilizar técnicas complejas como la « performance », que se ha utilizado para presentar trabajos importantes como las tesis doctorales. Iniciativas como la presentación de la tesis doctoral en 3 minutos han podido contribuir al desarrollo de procesos de síntesis de ideas complejas, que no sólo ayudan a los estudiantes a difundir sus avances en la redacción de sus trabajos, sino que también han servido para orientar a los estudiantes en el propio desarrollo de sus tesis. Iniciativas dinámicas como la « clase invertida » han cambiado el aula tradicional en la que el profesor imparte primero la clase y luego el alumno estudia en casa. Ahora los alumnos vienen con el contenido sabido y aprendido en casa, y la clase se convierte en un lugar de debate, de reflexión donde se resuelven las dudas y se consolidan los contenidos.

Por ello, proponemos poner en marcha un procedimiento de trabajo para el desarrollo de nuevas metodologías didácticas que deberían basarse en los siguientes aspectos o elementos:

OBJETIVOS :

1. Adquirir conocimientos sobre hechos diversos relacionados con la enseñanza superior y la aplicación de metodologías activas. Se tratarán los siguientes aspectos: el papel de la educación en la sociedad contemporánea, la formación en la elaboración de planes de estudio y la coordinación de titulaciones, los nuevos métodos de enseñanza y las técnicas participativas, la formación en competencias multidisciplinares y transversales, el reto de la interculturalidad, la expresión corporal y la actividad física, y la adaptación de los alumnos con discapacidad.
2. Proporcionar al Ministerio contenidos sobre pedagogía con los medios de comunicación y soluciones audiovisuales y presentar fórmulas para la elaboración de material didáctico árabe-español y lexicografía árabe-francesa-española. Se dará cabida a las soluciones audiovisuales para personas con discapacidad.
3. Proporcionar formación profesional en el ámbito de los medios audiovisuales para la gestión, la investigación y la enseñanza. Se proporcionará formación para el desarrollo tecnológico de los recursos de aprendizaje y para el aprendizaje a través del campus virtual. Se hará hincapié en la diversidad.